Dice la canción que la distancia es el olvido y no tengo más remedio que afirmar con rotundidad que, en mi caso, no estoy dispuesto, ni por asomo, a que los kilómetros que me separan de la ciudad del Betis supongan el más mínimo desapego hacia una forma de sentir, y casi diría que vivir, a la que tuve ocasión de llegar a través de mi ejercicio profesional y que acabó cautivándome hasta convertirse en un rasgo más indisoluble de la personalidad de quien os escribe.

Sabéis de sobra que desde hace unos meses me he embarcado en una tarea que absorbe la mayor parte de mi tiempo, pero que de ningún modo resulta incompatible por el amor y respeto que siento por ese club nuestro al que me enorgullezco haber podido servir en dos etapas de mi vida, y al que jamás podré agradecer y corresponder por tantos momentos felices, tanta buena gente conocida y tantas y tantas cosas que os podría contar hasta llenar cientos de páginas repletas de anécdotas, recuerdos y vivencias que me han servido para realizarme tanto en el ámbito profesional como el personal.

Hablaba de la distancia al comienzo de estas letras y no tengo más remedio, en esta ocasión, que agradecer a Betis Web el enorme esfuerzo que realiza día a día para que quienes no tenemos la fortuna de vivir en las cercanías del Real Betis Balompié, podamos estar al tanto de todo lo que pasa en el club, e igual de importante, de lo que piensan los béticos. Gracias de todo corazón porque nos acercáis nuestro Betis a quienes lo necesitamos tener presente para seguir con nuestra vida en la distancia.

Aprovecho esta oportunidad para desearos de todo corazón el mayor de los éxitos en esta nueva andadura, así como para pediros que sigáis llevando el sentimiento bético a tantos y tantos que no tenemos la fortuna de respirar el aire de Heliópolis en los días de partido. Al mismo tiempo, quiero expresar desde estas letras mi absoluta confianza en un futuro que ojalá permita aquello que expresé recién llegado a la ciudad en la primavera de 1994: que la dimensión deportiva del club alcance a su trascendencia social.

Con la confianza de que los tiempos que están por venir serán los del resurgimiento del Betis que los béticos de corazón merecen, os envío un abrazo de quien nunca podrá devolver, al Betis y a los béticos, todo lo que me habéis dado.

Lorenzo Serra Ferrer. Socio y accionista del Real Betis Balompié.