La salida de Robert está acarreando más de un quebradero de cabeza al Real Betis. El PSV, equipo que tenía los derechos de Robert, ha denunciado al Betis ante la FIFA reclamando el pago de su traspaso.
La historia es más o menos así: si al principio el club verdiblanco aseguró que se ejecutaría la opción de compra que existía por el carioca (recordamos que estaba en calidad de cedido pero con opción a compra), la entidad finalmente se echó atrás y descartó al jugador.
¿Por qué denuncia entonces el PSV? Porque entienden que el fax que se le envía el día 4 de julio desde la entidad helipolitana -asegurando que llevarán a cabo la adquisición del delantero- es "vinculante", por lo que según ellos, el Betis debería abonar el dinero correspondiente al traspaso.
Un embrollo que será encargado de resolver los tribunales de la FIFA, y en el que queda patente que nadie quiere al jugador.
La historia es más o menos así: si al principio el club verdiblanco aseguró que se ejecutaría la opción de compra que existía por el carioca (recordamos que estaba en calidad de cedido pero con opción a compra), la entidad finalmente se echó atrás y descartó al jugador.
¿Por qué denuncia entonces el PSV? Porque entienden que el fax que se le envía el día 4 de julio desde la entidad helipolitana -asegurando que llevarán a cabo la adquisición del delantero- es "vinculante", por lo que según ellos, el Betis debería abonar el dinero correspondiente al traspaso.
Un embrollo que será encargado de resolver los tribunales de la FIFA, y en el que queda patente que nadie quiere al jugador.