Creo que este ha sido el partido que peor me ha sentado desde que tengo uso de razón, más incluso que el último descenso.
Igual estoy exagerando y no ha sido para tanto lo que he visto en el partido y no precisamente en el césped.
Vengo también condicionado por los comentarios diversos que he visto por el foro criticando a todo lo que se mueve, ahora que no tienen a Su Querido en el banquillo.
Como decía, he sentido vergüenza.

Otras vez lo he sentido también, pero era por algo tan pasajero como presidentes, jugadores o entrenadores.
Hoy lo he sentido de la afición. Soy injusto al decir "la afición", pues sólo se trata de una parte (me importa poco qué porcentaje sobre la total representa). Pero me hallo tan perplejo que la denomino como la afición.

Muchas veces el Betis me ha ayudado, me ha dado buenos momentos y quien me lo ha dado ha sido la afición que teníamos, la envidia de España. Desde hace un par de semanas y sobre todo en estas últimas, me estoy dando cuenta que no hay motivo para ello. Que somos igual de tontos que otras aficiones. Que permitimos que nos regalen los oídos. Que aceptamos lo que nos llega de la prensa como si de la Biblia para un cristiano se tratara. Que no somos capaces de ver lo que hay detrás palabras. ¿Saben? En mi vida siempre he estado marcado por ello, pocas veces he confiado en la palabra, porque las veces que he confiado he acabado vendido. Y ambas posturas me han hecho más fuerte. Me han hecho comprender muchas de las cosas que se esconden tras las palabras.

Hemos creído en palabras de un entrenador que estaba de paso, pero como era algo distinto a lo que tenemos normalmente, le endiosamos. Muchos lo necesitan, creer en las palabras de alguien ciegamente. Nos reíamos, yo al menos, de lo que ocurría en Madrid con Mourinho, como los madridistas se ven manejados por la prensa. Iluso de mí, pensar que aquí, algunos no iban a ser menos...

No voy a entrar más detalles, pues se han intentado dialogar durante días, semanas... y así seguirá hasta bastante tiempo y a muchos les dará igual la situación del club, seguirán con esa idea, ciegos o cegados. Tengo miedo, ya había olvidado el daño que hacen Los Endiosados y en pocas semanas lo he vuelto a vivir. No me extrañaría que la salida de uno de ellos, provoque la llega de otro de ellos. No sé si es bueno o tremendamente malo, que nadie, que muchos de los que están con ganas de incendiar todos ignoren que están allanando el camino para el próximo.

No tengo ganas ni que me discutáis, pues eso es lo que se hace últimamente por aquí. Entiendo que el fútbol sea algo visceral y que no se espere mucho diálogo con sentido ni consentido. Y a muchos les pierde tesis sin ningún fondo que repiten cual loros. No son capaces de razonar, a pesar de que, como digo, en un deporte no sea condición sine qua non. ¿Saben? Ojalá tuviera yo un periódico, y un canal de TV, pero no para vender, ni para hacerme rico, sino para intentar que la gente hablara más allá de tres frases repetidas en sus diferentes variantes. Pero es un mal endémico, no solo pasa en este club, ni en este deporte, ni en este país. Me imagino a extraterrestres discutiendo porque ha entrado uno de color violeta a su tienda hablando de ideas razonadas.

Y yo también tengo lo mío, seguro que también tengo mis ideas preconcebidas (¡qué daño hacen!), pero me enfrento a ellas, en lugar de reforzarlas, en lugar de usarlas como armas contra otros pues, ante todo, es un arma contra la propia persona.

Yo pido la vuelta de Mel, incluso pagaría dinero de mi bolsillo. Eso sí, como condición, se tendrían que ir todos estos aduladores, retuiteadores de ideas, grabadoras de lo inútil. Pero, no sé por que lo creo así, pero en ese ambiente, Mel no querría venir, no tendría con nada con lo que taparse.

El club está por encima de cualquiera, jugadores, entrenadores, ST, presidentes, vosotros, yo...
Miento.
El club debería estar por encima de todo eso.

Hay gente en el foro con ideas relativamente distintas: en contra de Mel, a favor, en contra de los jugadores, a favor (o sabedores que son nuestra única herramienta), en contra de la ST, (aquí poca gente estará a favor), en contra de Bosch (esto es algo que nunca llegué a entender), a favor o conscientes de por qué y para qué está aquí...
En cualquier caso, opiniones muy dispares. Pero luego, hay otro grupo, que va más allá de una opinión, más allá de una idea. Espero no se sientan insultados, pero son auténticos hooligans, no sé qué prefiero creer, si lo hacen a sabiendas, o son otro juguete roto de la prensa, otro engañado más... Todos sabemos quiénes son y cómo de diferentes son sus posturas (aunque en la práctica, la idea sea parecida) de las de cualquier bético.

Hay gente que intenta, dialogar con ellos, hacerles ver otro punto de vista, pero al par de días reconoce la labor como imposible. Yo he sido uno de los que ha intentado dialogar y, cobarde o no, ante esa parte de la afición bajo las cuerdas del titiritero más fuerte e invisible (no busque una cara en particular), viendo como se desarrollan los acontecimientos, entiendo que esta es mi parada. Seguiré mi camino andando.

Que paren el mundo, señores, que yo me bajo aquí.