¿En la ciudad deportiva del Betis? ¿En serio?

Como avanza todo,parece que se pueden organizar cosas en la ciudad deportiva el club.

El Betis cediendo instalaciones para que una organizacion que se puede posicionar a favor o en contra del club ejerza una asamblea de asociados.

Blanco y en botella, todos sabemos el resultado

Ay, penebé, penebé, quién te ha visto y quién te ve.

Mira en la ciudad deportiva del Betis que curioso.
Se prevee una asamblea muy critica con el poder establecido
Jeje

Voy a ver si me dejan organizar una fiesta de cumpleaños.

Si eso es lo que más os preocupa...

Y que mas da lo que nos preocupe para la cuenta que nos van a echar......

http://sevilla.abc.es/deportes/alfin...510501092.html

La inmoralidad del derecho de suscripción preferente en la venta de las acciones del Betis

Hay que exigir a los accionistas que no lo ejerciten porque de lo contrario dificultarán un reparto mayoritario de títulos, y por tanto, el Betis de los béticos

José Antonio Tirado es el presidente de Por Nuestro Betis.

En cumplimiento de uno de los principales puntos del acuerdo alcanzado el 28 de julio pasado entre los demandados y la mayoría de los demandantes, incluyendo el Real Betis Balompié, SAD, acuerdo por el que se daban por satisfechos todos los procedimientos judiciales, se ha pactado un proceso para la venta por la sociedad del 51,77 % de las acciones del Real Betis Balompié, SAD, que será sometido a aprobación en la próxima Junta de la sociedad. El 31,38 % del total del capital social, que saldrá a la venta con un precio de 120 € ( 60,10 € de 1992 actualizado con el IPC) cada acción entre nominal y prima de emisión, corresponde a las acciones cuya suscripción, el 30 de junio de 1992, ha sido declarada nula por un Juzgado de lo Mercantil de Sevilla, sentencia aún no firme, aunque en el acuerdo antes citado, de fecha anterior a la sentencia, Farusa ya se las había entregado al Real Betis Balompié, SAD, como una de las partes del acuerdo global alcanzado. La puesta a disposición de estas 36.869 acciones entre el mayor número posible de accionistas y abonados béticos, fue un posicionamiento unánime de todos los firmantes del acuerdo del 28 de julio de 2017, y así quedó plasmado en el documento. Para ello, se ideó un proceso de venta de estas acciones, entre los accionistas y los abonados del Real Betis, con el que se pretende conseguir el mejor reparto, con un tope de diez acciones máximo por comprador, e intentando dar al menos una acción a todos los que quieran comprar, yendo siempre el reparto de menos a más.

Ya en el mismo cuerpo de la demanda que presentaron diecisiete accionistas béticos, en uno de sus pedimentos, se expresaba que una vez anulada la suscripción de estas 36.869 acciones, era no solo necesario, sino obligatorio, el recomponer el capital social mínimo del Real Betis Balompié, SAD, puesto que no haciéndolo se incurriría en causa de disolución de la sociedad. Para ello, se le pedía al Sr. Juez que ordenara la recomposición del capital, y que la misma tuviese el carácter de suscripción originaria, puesto que deviene de una actuación irregular previa a la constitución de la SAD, el 30 de junio de 1992. El Sr. Juez en su sentencia, no firme, elude el pronunciarse sobre este tema, dejándolo expresamente en manos de los socios de la SAD. En dicha demanda también se argumentaba el posicionamiento contrario de los demandantes al posible uso del derecho de suscripción preferente (DSP), dado que es una recomposición del capital vía ampliación temporal del mismo. Y es que esta circunstancia, la del posible ejercicio por parte de los actuales accionistas del Real Betis Balompié, SAD, de dicho derecho, la que puede producir la mayor perversión e inmoralidad de un proceso que solo han tenido como fin el poner un importante paquete del capital social en manos de los béticos, unas acciones manchadas en su origen, primero por cómo fue inflado artificialmente el importe del capital social a constituir, y después, por la apropiación irregular de parte del mismo durante más de veinte años.

Con los fines perseguidos, se hacen necesarias dos actuaciones: La amortización de las 36.869 acciones y la emisión de unas nuevas de igual número, con los requisitos necesarios para favorecer su atomización y para entorpecer su posible especulación. En el punto séptimo de dicha Junta, se ordena al Consejo de Administración de la SAD que cuando la sentencia tenga firmeza, o incluso antes, cuando sean levantadas las medidas cautelares del mismo Juzgado sobre dichas acciones, en la primera Junta de Accionistas que se convoque, debe llevarse la propuesta de amortización de las acciones devueltas por Farusa, impidiendo la tentación de que cualquier Consejo de Administración, presente o futuro, decida enajenarlas. Y pese a que el objeto sea la recomposición del capital social, al hacerse la misma por medio de una nueva emisión de 36.869 acciones, esta actuación se considera como una ampliación de capital. Eso conlleva, en cumplimiento de la Ley de Sociedades de Capital, el que los accionistas de la sociedad, en referencia al número de acciones que titulen a la fecha del acuerdo, puedan ejercitar el derecho de suscripción preferente sobre las acciones emitidas en esta singular ampliación, con el fin previsto en la Ley, presunto en este caso, de que no salgan perjudicados diluyendo su peso accionarial con una ampliación de capital. Partiendo del hecho de que el capital social del Real Betis Balompié, SAD, nunca superará las 117.500 acciones actuales, salvo en el corto periodo transitorio hasta que se amorticen las 36.869 devueltas, que figurarán, hasta entonces, en autocartera, no puede haber accionista alguno que se vea perjudicado por la venta de estas nuevas 36.869 acciones, puesto que el único caso que se podría dar es que aumentara el porcentaje de la propiedad de la SAD, comprando hasta diez acciones, y si no compra alguna, mantiene siempre el que tiene, nunca pierde. Pretender que si no se le permite comprar con el DSP el mismo porcentaje de acciones que representa ahora en la SAD de la nueva emisión de acciones, se le está perjudicando, es de una desfachatez asombrosa.

Pero aún puede haber más, porque otro grave problema es cómo se aplica el DSP, y es que algunos pueden considerar también que se aplica no sobre las 117.500 acciones, sino sobre el número de acciones unas vez sean descontadas las de autocartera (23.969) y las devueltas y aún pendientes de sentencia firme (36.869) ¿Qué resulta con ello? Que accionistas que tuviesen, por ejemplo, un 4% sobre 117.500, se transforma en un 8,29%, al calcularse sobre 56.662 acciones, por lo que tendría derecho preferente de compra sobre un 8,29% de las 36.869 acciones de la ampliación. Este caso de posible aplicación del DSP sobre esta emisión y venta de 36.869 acciones del Real Betis, encaja perfectamente entre los ejemplos de aquello de que aun siendo legal, es tremendamente injusto, además de inmoral e insolidario con muchos béticos que por edad o por otras circunstancias no pudieron comprar en el año 1992 y ahora tienen la oportunidad, y choca de frente con la misma esencia del Betis de los Béticos. Pero sobre todo el problema es moral, ¿cómo pueden beneficiarse accionistas, incluso algunos que no compraron precisamente en el 92 su paquete accionarial, de irregularidades cometidas hace 25 años para incrementar su capital argumentando que si no se le perjudica? Es más, como saben, el derecho de suscripción preferente es transmisible, por lo que antes de la última fecha de la primera ronda en la que van los accionistas con su DSP, se abriría un mercado persa sobre el mismo, porque, evidentemente, entre comprar acciones a 120 euros o a 477 euros hay una notable diferencia. La alternativa que se plantea es el presunto ejercicio voluntarista de que los accionistas significativos renuncien al DSP, en una SAD en el que hay todavía algunos que no se han enterado que la guerra ha terminado, y que hemos ganado todos, el Betis y todos los béticos, y esta lucha no era ni para ponerse medallas, ni para limpiar pasados de los que ya no se acuerda nadie, pasados que, en todo caso, solo hay que recordarlos para no cometer los mismos errores. Hay que exigir a todos los accionistas del Real Betis, tanto a los significativos como a los minoritarios, que no ejerciten el derecho de suscripción preferente, porque si lo hacen, harán casi inviable el poner a disposición un número de acciones que dé respuesta a la demanda de los béticos y, por lo tanto, ese Betis de los Béticos por el que tantos años hemos luchado tantos.



El amigo Tirado lo mismo te pide prestado la Cd para una junta "democrática" que te pide prestado medios cuasi oficiales para escribir como si un blog se tratara, vaya tio.

Un fenomeno el tio

Que asquito me esta dando todo otra vez...

Por Tirado en su blog personal en AFDLP.. surrealista.

Se puede entender que en el momento de que un accionista quiera ejercer su derecho a la suscripción preferente, el resto, o mejor dicho, algunos..., se tirarán sobre las acciones a comprar su "parte" con el pretexto de que fulano fue el primero....?
Si fuera así, adios a la oportunidad de poder comprar alguna acción los que no pudimos hacerlo en 1992.

Está que se sale ya Pepe.