Brasil ha recibido muchas críticas por su juego ante Colombia. Dunga está en el disparadero, pero ayer sugirió que ante Ecuador, mañana en Maracaná, está dispuesto a repetir el equipo que empató en Bogotá. La torcida es un clamor: que vuelva Ronaldo.

Para presión la de Brasil. Lo demás es cuento. Un empate ante Colombia en Bogotá ha disparado todas las alarmas. Como si sacar un puntito de visitante en las eliminatorias suramericanas para el Mundial fuera tarea fácil... El caso es que a Dunga le han llovido las primeras críticas serias desde que se hizo cargo de la canarinha y a Brasil los primeros palos. Los peores, claro está, los que le han llegado desde Argentina, su eterno rival: "Brasil es un sueño de selección... te deja dormido", tituló Olé en de Buenos Aires.

Pero la gran polémica no ha sido tanto por el resultado del partido de El Campín sino por el fútbol que desplegó Brasil, que no ha gustado a nadie y que Kaká trató de disculpar echándole la culpa a la altitud: "Complica el control del balón y eso no beneficia a Brasil sino al rival".

Dunga ha tratado de superar las ausencias de Adriano y de Ronaldo con el llamado triángulo mágico formado por Kaká, Ronaldinho y Robinho. Son magníficos los tres, pero entre todos no hacen un 9 de verdad. Y eso es lo que echa en falta Brasil. Tanto que un histórico, Leonardo, cree que ahí está la razón de todos los problemas: "La única posibilidad de que regrese el gol es que Ronaldo vuelva a la selección". Y eso tendrá que esperar. Se anunció su vuelta a los campos para el domingo, pero él mismo se ha encargado de decir que no jugará ante el Empoli: "Ya nos precipitamos una vez y no nos equivocaremos más. Aún me falta".

Total, que el técnico sugirió que mañana volverá a poner ante Ecuador en Maracaná al mismo equipo que comenzó el partido en Bogotá. Más triángulo mágico y más Vagner Love como único punta. Un estilo más de Dunga que de Brasil.