Crónica. Defensa verdiblanda 4-2. Valencia CF vs Real Betis

El Real Betis ha visitado Mestalla en la jornada 14 del Campeonato Nacional de Liga, donde ha caído con estrépito ante un colista que llevaba un mes sin disputar un partido oficial. El 4-2 final deja en mal lugar a jugadores y cuerpo técnico: la defensa bética ha hecho aguas de forma calamitosa. Ha sido un choque enormemente emotivo, el primero del equipo valencianista tras la catástrofe de la DANA de hace apenas 3 semanas. Han presenciado el partido en directo 43975 espectadores, con unos 500 béticos en las gradas.

Ante la plaga de bajas (recordemos que William Carvalho, Isco, Marc Roca, Bellerín, Fornals, Mendy y Johnny Cardoso no han podido ser convocados hoy por lesión), había varias incógnitas en el once inicial de Pellegrini. Finalmente se despejaron así: el acompañante de Altimira en el mediocentro fue Carlos Guirao, prometedor canterano que ha debutado como titular con el primer equipo. Por delante, la línea de tres cuartos la han formado Aitor Ruibal, Íker Losada y Abde, titular tras jugar con su selección. El resto de la alineación la han compuesto el portero Rui Silva; Sabaly y Perraud en los laterales; Natan y el capitán Bartra en el centro de la defensa y Vitor Roque en punta. Es decir, ni Lo Celso ni Diego Llorente han sido de la partida (el argentino entró en la segunda mitad).

Por su parte, pocas sorpresas en el once de Rubén Baraja: Mamardashvili, Foulquier, Gayà, Javi Guerra, Luis Rioja y Hugo Duro han sido lo más destacado de la alineación del equipo che que ha formado con defensa de 5. El equipo che ha jugado de negro como muestra de luto por las víctimas de la DANA.

Se estima que hasta 8000 socios del Valencia CF se han visto afectados por la reciente catástrofe climática. Por ello, ha habido una enorme y lógica emoción en los prolegómenos del partido, con banderas, crespones, pancartas, mosaico e incluso lágrimas en unos aficionados y jugadores que intentan, como buenamente pueden, reiniciar sus vidas.

Tras un homenaje sobrecogedor que retrasó 5 minutos el inicio del choque, había que intentar jugar al fútbol… y el Valencia fue quien mejor lo entendió. De hecho, tras el tanteo inicial, Abde comete un error en salida de balón que termina en corner para el equipo local. En el saque de esquina la defensa bética está demasiado contemplativa: tras varios rechaces el balón le llega a César Tárrega, y el excentral del Valladolid solo tiene que fusilar desde cerca a Rui Silva. 1-0 en el minuto 8.

El Betis reaccionó inmediatamente: 3 minutos después del gol, Abde dispuso de un mano a mano que Mamardashvili desbarató sin demasiados problemas, y justo al filo del primer cuarto de hora de juego, una falta lateral cometida sobre el marroquí es lanzada al área por Aitor Ruibal y peinada por Hugo Duro a su propia portería. La cosa se equilibraba en el minuto 14.

Abde seguía acaparando protagonismo: estuvo cerca de anotar en el minuto 16 en una acción en la que su disparo ajustado pero flojo es bien detenido por el portero valencianista, y provocó la primera amonestación del partido en el 20, para el futbolista local Barrenechea.

Tras un inicio con tantos sobresaltos, el partido empezó a tranquilizarse. El balón no tenía dueño, los centrales de uno y otro equipo abortaban cualquier intento de peligro: Mosquera en el Valencia y Natan en el Betis mandaban en el césped. El centro del campo era irrelevante, y los de Pellegrini se limitaban a buscar la contra. Sin embargo, pese a que Altimira y Guirao estaban muy activos, las luces se apagaban en cuanto el balón llegaba a unos imprecisos Losada y Vitor Roque. Así, ambos porteros se convirtieron durante la siguiente media hora en meros espectadores: solo tenían que estar atentos a los ocasionales balones colgados. Los sobresaltos llegaron ya al filo del descanso: primero es Diego López quien se impone por alto a Bartra y cabecea la pelota, que golpea en el poste. Y ya en el descuento, Vitor Roque primero y Bartra después estuvieron cerca del tanto.

El partido se fue a vestuarios con el marcador de empate a 1, con todo por decidir en el segundo tiempo.

Y como en la primera parte, fue el equipo local el que salió al campo más enchufado en la segunda, consiguiendo además un triple premio. Primero, en el minuto 50, un disparo de Javi Guerra desde la frontal del área es rechazado por Guirao, pero el balón coge altura y le cae a Hugo Duro, que volea solo a gol. Después, en el 53, una nula presión de Altimira en el centro del campo propicia un pase filtrado que el mismo Hugo Duro pica sobre Rui Silva. Y como colofón, en el 56, un balón al área es mal despejado por Bartra y Diego López engancha una volea que Rui Silva no puede atajar. El partido se ponía 4-1 en un visto y no visto.

Pellegrini decidió hacer 3 cambios tras encajar los 3 tantos. Lo Celso, el Chimy Ávila y Bakambu entraron por Íker Losada, Aitor Ruibal y Carlos Guirao. La tarea por delante era titánica, pero el Chimy Ávila puso una chispa de esperanza: en una jugada embarullada en la frontal del área, el argentino caza un disparo cruzado ajustado que sorprende a Mamardashvili. 4-2 en el minuto 65.

Pero fue un espejismo: el equipo estaba noqueado, sin poder imponerse en ningún momento a su rival. Los jugadores de refresco, salvo Diao y el Chimy Ávila, entraron con la apatía del resto. Los de Pellegrini empezaron a buscar balones al área desde las bandas, con un Bakambu desacertadísimo: cuando no estaba en fuera de juego, remataba a las nubes.

El tiempo pasaba y el Betis no tenía nada que ofrecer. Sin apenas peligro, el Valencia vivió muy plácido el resto del envite, que terminó con el mencionado 4-2. Los de Pellegrini encajaron 4 goles en 5 remates recibidos, saliendo absolutamente al campo desconectados en ambos tiempos, y todo ello ante el colista. El análisis es desolador.

Con este resultado, el Valencia cede la última plaza de la tabla al Valladolid y el Betis confirma su frenazo: 2 puntos en los últimos 3 partidos, lo que va a hacer que con toda probabilidad el equipo pierda varias posiciones al terminar esta jornada.

Los de Pellegrini tendrán su próximo reto el jueves en la Conference League, ante el Mladá Boleslav checo. Tras esta imagen, y con las innumerables bajas, cualquier rival da miedo. Es obligatorio mejorar.