Derrota sin paliativos de los pupilos de David Zamorano en la tarde del sábado ante FS Talavera en un encuentro en el que los de Juanma Marrube fueron letales de cara a portería mientras que el filial del Real Betis FS no supo aprovechar las oportunidades de las que dispusieron.
La primera ocasión para los verdiblancos vendría de la mano de Raúl López poniendo en apuros a Alex Pérez que enviaría a córner, tras el lanzamiento sería Charly quien lo intentara pero de nuevo el guardameta local evitaba el gol, Buitre circulaba la pelota y tras fintar al defensor batía a Jaime estableciendo el 1-0, Javi Amorós de volea estrellaría el esférico en el palo, Andrés anotaba el 2-0. David Zamorano pedía tiempo muerto para poner orden en sus filas, pero no había pasado un minuto cuando veía que Porto mandaba el esférico al palo y Rivera marcaba el 3-0. Faltaban 8 minutos para llegar al descanso cuando el técnico madrileño del Real Betis sacaba portero jugador, no quería que se le fuera el partido y de paso contrarrestar el juego de los locales pero un pase largo con la mano de Alex Pérez lo cazaría con el pecho Rivera para subir el 4-0. Jorge Labrador probaría fortuna con un fuerte disparo que sacaría con la mano el portero de Talavera, Juanma Marrube quería más y jugaba de cinco por medio de Buitre, Andrés ponía el quinto tanto en el marcador, ocasión para Guido que a puerta vacía enviaría fuera el esférico, Álvaro Otero sacaba un disparo pero de nuevo Alex Pérez desviaba con apuros, la pelota no quería entrar, con el 5-0 llegábamos al descanso.
La segunda parte no podía empezar peor con el tanto de Anass que remataba ajustado al palo anotando el sexto, Pablo Otero tendría su oportunidad en un mano a mano con Alex, en el 33´ Charly anotaba el 6-1 tras disparo al segundo palo, en la jugada siguiente Porto marcaba el séptimo cerrando un partido para olvidar.
No queda otra que corregir los errores, levantar la cabeza y pensar en el próximo partido ante Bisontes Castellón. En segunda división no basta con la calidad y el desparpajo de unos jóvenes que llegan con la ilusión de comerse el mundo, hace falta cabeza fría, intensidad durante los 40 minutos y juego de conjunto para poder equilibrar la balanza ante equipos que en esta división vienen de vuelta.