Aún es pronto para hablar de cambios, aunque las sensaciones que dejó el conjunto de Rubi sobre el Villamarín la pasada jornada son las más positivas de la temporada. Sin embargo, aún le hace falta ganar confianza, pues eso no solo se logra con un partido. Por ello, este sábado, el Real Betis buscará otros tres puntos ante uno de los ascendidos -y el que menos suerte está teniendo-, el Mallorca.
Se necesitan más alegrías
El equipo de las trece barras, una jornada más, comenzó perdiendo en su propio feudo. El Valencia se encargó de abrir la lata en Heliópolis y, desde ese momento, el Betis desplegó la mejor versión que se ha visto durante esta campaña (junto a la del partido contra el Real Madrid). Aunque sigue sufriendo mucho en defensa, se lanzó al ataque, donde le sobra calidad, y consiguió darle la vuelta al marcador con un tanto del capitán Joaquín y un golazo de falta directa de Sergio Canales, quien, además, se ha ganado la renovación.
Sin embargo, es pronto para hablar de punto de inflexión. Una única victoria no soluciona los problemas del Betis, aunque pudo reponerse del resultado negativo del derbi. Para que Rubi vuelva a ganarse la confianza de la afición verdiblanca, necesita encadenar varios triunfos para así levantar ese sueño europeo. Para ello, viajará a las Baleares, aunque no tendrá a su disposición a los lesionados William Carvalho, Tello ni Sidnei.
Al borde de la agonía
Aunque en Son Moix no están yendo las cosas del todo mal, al conjunto mallorquín le está costando sacar resultados del todo positivos. Solo ha salido derrotado en dos encuentros en su propio feudo, ante Atlético de Madrid y Real Sociedad, y ha conseguido grandes hazañas como la victoria por la mínima frente al Real Madrid o su última victoria contra un equipo que se encontraba en buena forma, el Villarreal. Sin embargo, cuando le ha tocado jugar a domicilio, ha sido caída tras caída lo que le ha tocado vivir al equipo balear.
El Mallorca consiguió salir del descenso, pero lo difícil va a ser mantenerse lejos de ese precipicio. Es cierto que cuenta con piezas claves como Lago Junior, que podría volver a la convocatoria, Febas en la mediapunta o Salva Sevilla y Baba en ese doble pivote. Además, según comentó el técnico Vicente Moreno en la rueda de prensa previa al encuentro también espera en la parcela ofensiva a Budimir y a Cucho, quien podría recibir el alta médica.
Un rival complicado
El conjunto insular nunca le ha hecho fácil el camino al Real Betis. Aunque la última vez que se enfrentaron en la temporada 2014-15 en Segunda División el conjunto verdiblanco logró imponerse en los dos duelos, en Primera el más beneficiado ha sido el Mallorca. Para revivir la última victoria del cuadro de las trece barras en Son Moix hay que remontarse al año 2002, concretamente al día 28 de abril, cuando Zarandona, Joao Tomás y Amato consiguieron mojar para poner el 1-3 a favor de los béticos.
Desde hace 17 años, el Betis no ha conseguido traerse los tres puntos a Heliópolis en la máxima categoría y esta vez tampoco va a tener un camino de rosas. El equipo de Vicente Moreno se hace fuerte en casa y más ahora que necesita mantenerse fuera del descenso. Sin embargo, si los de Rubi quieren prolongar su alegría y demostrar que de verdad hay un punto de inflexión, tendrá que sumar su primera victoria fuera de casa de esta campaña y mirar hacia arriba.