El Betis volvió a caer derrotado en casa mostrando, otra vez, su peor cara: la de un equipo roto, plano y con unas carencias defensivas preocupantes. Asensio aniquiló al Betis en un partido donde ningún equipo fue superior al otro pero venció el equipo con las ideas más claras.
Dos semanas para preparar un partido y que en tres minutos ya lo tengas cuesta arriba es preocupante. Dos semanas, y si apuras un año, para ver como juega Asensio y le dejas recibir con una libertad absoluta y jugar a placer. Dos semanas para volver a repetir los mismos errores que te condenaron ante el Deportivo hace un mes. Mel y la cabezonería.
Y sí hablamos de la cabezonería de Mel, ya obviando el recurso de sacar cuanto más delanteros mejor si el partido se pone feo para cerrar cualquier opción de remontada y de instaurar un estado de pánico y precipitación en los jugadores sin pasar los veinticinco minutos de partido, no podemos dejar pasar de hablar como un jugador que pudo ser del Betis, Asensio, sí Mel y su orgullo no se hubieran puesto entre medías, ha destrozado al Betis con tres asistencias de gol. Y pudieron ser más.
El análisis del partido sigue la misma línea que el partido ante el Deportivo. El mismo guion, las mismas respuestas desde el banquillo, los mismos errores y las mismas situaciones de gol: contrataques de tres toques, un lanzador, un asistente y un goleador. Y así de fácil se gana en el Villamarín.
El Español dejaba a Asensio y Caicedo descolgados arriba que aprovechaban los envíos inteligentes de Víctor Sánchez. Mientras pasaba esto, N’ Diaye, que pareció no entrar en el partido en ningún momento, y deambulaba en el campo sin rumbo fijo, dejaba una distancia mortal entre la defensa y el mediocampo donde Asensio sobresalió.
Cuatro puntos de doce posibles en el Villamarín. Siete de doce fuera de casa. Y la explicación es muy sencilla, este Betis necesita estar junto para hacer su mejor fútbol por lo menos por el momento hasta que las piezas se asienten.
Necesita replegar y crecer desde, y a partir de, la defensa. Y eso en casa, por la presión popular, no lo puede hacer. Si analizamos como se consiguió la única victoria en casa, creo que la premisa se entiende perfectamente.
Autocritica, autocritica y más autocrítica. Desde ahí solo se puede crecer porque base hay.
El uno a uno:
Dos semanas para preparar un partido y que en tres minutos ya lo tengas cuesta arriba es preocupante. Dos semanas, y si apuras un año, para ver como juega Asensio y le dejas recibir con una libertad absoluta y jugar a placer. Dos semanas para volver a repetir los mismos errores que te condenaron ante el Deportivo hace un mes. Mel y la cabezonería.
Y sí hablamos de la cabezonería de Mel, ya obviando el recurso de sacar cuanto más delanteros mejor si el partido se pone feo para cerrar cualquier opción de remontada y de instaurar un estado de pánico y precipitación en los jugadores sin pasar los veinticinco minutos de partido, no podemos dejar pasar de hablar como un jugador que pudo ser del Betis, Asensio, sí Mel y su orgullo no se hubieran puesto entre medías, ha destrozado al Betis con tres asistencias de gol. Y pudieron ser más.
El análisis del partido sigue la misma línea que el partido ante el Deportivo. El mismo guion, las mismas respuestas desde el banquillo, los mismos errores y las mismas situaciones de gol: contrataques de tres toques, un lanzador, un asistente y un goleador. Y así de fácil se gana en el Villamarín.
El Español dejaba a Asensio y Caicedo descolgados arriba que aprovechaban los envíos inteligentes de Víctor Sánchez. Mientras pasaba esto, N’ Diaye, que pareció no entrar en el partido en ningún momento, y deambulaba en el campo sin rumbo fijo, dejaba una distancia mortal entre la defensa y el mediocampo donde Asensio sobresalió.
Cuatro puntos de doce posibles en el Villamarín. Siete de doce fuera de casa. Y la explicación es muy sencilla, este Betis necesita estar junto para hacer su mejor fútbol por lo menos por el momento hasta que las piezas se asienten.
Necesita replegar y crecer desde, y a partir de, la defensa. Y eso en casa, por la presión popular, no lo puede hacer. Si analizamos como se consiguió la única victoria en casa, creo que la premisa se entiende perfectamente.
Autocritica, autocritica y más autocrítica. Desde ahí solo se puede crecer porque base hay.
El uno a uno:
| Adán: Quizás pudo hacer algo más en los dos primeros goles. Pero no fue determinante a la hora de buscar culpables en la derrota. Ficha de Adán |
|
| |
Piccini: No fue precisamente su mejor partido pero tampoco fue el peor en la línea de cuatro. Sus arrancadas ofensivas han sido de lo poco notable del Betis en el partido. Ficha de Piccini |
| |
Bruno: Hoy volvió a rendir por encima de su compañero en la zaga pero como ocurrió en el partido ante el Depor, no es un elogio. Los dos centrales del Betis hoy perdieron su duelo ante Caicedo. Y en ese detalle estuvo medio partido. Ficha de Bruno |
| |
Westermann: No tuvo su mejor partido con el Betis. Como Bruno, sufrió defendiendo a un Caicedo que salió reforzado del partido. Poco pudo hacer cuando a Caicedo se le unía una segunda línea de jugadores ante la pasividad del centro del campo bética. Ficha de Westermann |
| |
Varela: Sinceramente no tiene nivel para primera división. Por lo menos, por el momento. Es un punto de debilidad grande en el equipo. En cada partido, el Betis sufre demasiado por su costado y necesita la ayuda de un Portillo que brilla menos en ataque debido a ese desgaste. Ficha de Varela |
| |
Cejudo: Su peor partido en lo que va de temporada. Egoísta con el balón y en el esfuerzo, no realizó el trabajo defensivo que acostumbra. Su cambió al descanso era obligado. Ficha de Cejudo |
| |
N'Diaye: Seguramente brille mucho más en partidos donde el Betis no es protagonista, como son los partidos fuera de casa pero hoy ha sido el peor jugador junto a Varela de los 22 en el campo. Ni creó ventajas, ni ayudó a los laterales, ni pudo contener a la segunda línea del Español, y aún menos a Asensio. Ficha de N'Diaye |
| |
Petros: Revolucionado. Un mediocentro no puede ni debe subir tanto las revoluciones del partido tan pronto y menos si el equipo no te acompaña. Un mediocentro debe ser inteligente y hoy Petros no lo ha sido. Aun así, fue bastante mejor que su compañero en el medio. Ficha de Petros |
| |
Portillo: El mejor del equipo hoy. Con las ideas claras, regateo, creo superioridades y, además, mostró un despliegue físico importante para ayudar a su lateral. El fuelle le aguantó 70 minutos. Ficha de Portillo |
| |
Joaquín: Pepe Mel, con otra más de sus cabezonerías, le obliga a jugar por el centro donde obviamente se siente y se nota bastante perdido. Los mejores minutos del Betis coincidieron con Joaquín en banda aunque duraron lo que el Español, inteligentemente, permitió. Ficha de Joaquín |
| |
Rubén Castro: En fuera de juego. Totalmente solo arriba. Ni Joaquín, ni Portillo, ni Cejudo llegaban a su altura en el terreno de juego. Era una isla y acabó desesperándose. Ficha de Rubén Castro |
| |
Dani Ceballos: Dio otra cara a un Betis que le costaba mover el balón rápido. Pero la contra del segundo gol acabó por destrozar las pocas esperanzas del equipo verdiblanco. Lo que sí quedó claro es que Ceballos debe ser titular porque es el único que sabe ver el fútbol de cara y rápido. Ficha de Dani Ceballos |
| Van Wolfswinkel: Volvió a salir en un partido roto y donde operaba el caos, por lo que es imposible analizar sus cualidades. Necesita más minutos y más tiempo. Ficha de Van Wolfswinkel |
|
| |
Rennella: Lo mismo que con Ricky. No se puede analizar la salida de un jugador con el partido totalmente roto. Por lo menos, marcó su primer gol en primera división. Ficha de Rennella |