El Ayuntamiento de Dos Hermanas y el Real Betis Balompié llevan meses negociando la posibilidad de que el club levante su nueva ciudad deportiva en terrenos del municipio, en Entrenúcleos, en una pastilla de suelo municipal que se cedería con ese fin junto al Hipódromo, aunque los límites están por determinar.

Se trata de un tema “maduro”, según confirmó este viernes Agustín Morón, portavoz del gobierno socialista. Ha habido reuniones a nivel institucional –del presidente del Betis, Ángel Haro, y el alcalde, Francisco Toscano– y técnico y jurídico, para dar forma a la operación que se tiene que hacer, similar a la que se cerró con la Universidad Loyola Andalucía, cuyas obras avanzan cerca de donde aterrizaría el club. La próxima semana hay un nuevo encuentro técnico. Según ha podido saber este diario, se estaría hablando de un proyecto que supondría una inversión de 20 millones de euros, en al menos cuatro fases y varios años.

Morón precisó que la “demanda” de suelo que ha plateado el Betis supera las 15 hectáreas. El Consistorio dispone de más en esta zona de Entrenúcleos, la que ha propuesto para el proyecto al club, que ha mirado suelo en otros núcleos del área metropolitana y la capital, al margen de iniciativas de anteriores dirigentes en Benacazón o Guillena, que no se concretaron. El gobierno local considera que la iniciativa es de interés para Dos Hermanas.

A falta de algunas cuestiones, ya habría planos, con la idea de construir una ciudad deportiva de futuro, “al nivel de las mejores de Europa”, según Morón, que no quiso dar más detalles y remitió al club. Otras fuentes cercanas a éste, señalan que de desarrollarse al completo lo previsto, supondría un inversión de unos 20 millones de euros, aunque se acometería por fases, en varios años. Se trataría de la inversión más factible para el club en estos momentos que otras pendientes, como la reforma de la grada de preferencia o cubrir el estadio. La primera fase, que serían los campos de fútbol, pretende ser una realidad ya para la temporada 2019/2020.

Las instalaciones atenderían a las categorías inferiores del equipo pero irían más allá e incluirían residencia para jóvenes deportistas (que asistirían a centros educativos de la zona, de ahí la importancia de que esté bien comunicada y dotada), instalaciones para otras secciones del club, para entrenamientos y competiciones. Preguntado por el proyecto tras la reunión de la junta del gobierno local, Morón descartó que el complejo vaya asociado a la construcción de viviendas, como otras propuestas que llegaron y se rechazaron.

En varias fases, el complejo podría acoger entre ocho y diez campos fútbol de césped natural y artificial; uno de ellos más importante, con gradas, para competiciones de las categorías inferiores; un pabellón para los equipos de baloncesto y fútbol sala, oficinas y edificios para la formación de los deportistas. También se prevé una pista de atletismo e instalaciones para rugby. Fuentes cercanas al proyecto apuntan al interés además por la creación de una residencia de mayores para antiguos jugadores y trabajadores, en una última fase.

La intención sería mantener las instalaciones con las que ahora cuenta en Los Bermejales, para el entrenamiento de la plantillas del club, incluida la del Betis B y el Féminas y destinar estas nueva a la demanda al alza de las escuelas deportivas y para reforzar la cantera del club, como plan a largo y medio plazo. A Entrenúcleos se trasladaría también la sede de fundación, que ahora está en la Universidad Pablo de Olavide.

En cuanto a la operación que se cerraría para que el Betis pudiera hacer uso de los suelos públicos, sería similar a la que se firmó para la Universidad Loyola Andalucía y por la que el Ayuntamiento le cedió algo más de 10 hectáreas también en Entrenúcleos, la zona de crecimiento urbanístico de Dos Hermanas, entre Montequinto y el núcleo principal. Se trata de una cesión que se intentará hacer por “el máximo tiempo posible”. Se ha hablado de 50 años, pero en el caso de la Universidad de los Jesuitas se ha hecho por 75, el máximo que permite la ley. Con ésta como garantía, la Universidad ha podido pedir financiación, previa autorización municipal. La Loyola tiene establecido un canon anual de 150.000 euros, que afronta con becas a vecinos del municipio. La cesión al Betis debe hacerse también tras un preceptivo concurso público, en el que se delimitarían las exigencias y al que el club deberá presentarse.

“El club buscaba un espacio con garantías de suministros y accesos y buenas conexiones para transporte público y privado” y Entrenúcleos cumple los requisitos, subrayó Morón: no hay que adquirir, ni expropiar suelo, tendrá salida directa a la SE-40 y conexión a través de ésta con la SE-30, Cercanías y el Metro llega hasta Montequinto y hay prevista una prolongación de éste mediante tranvía que, de forma previa, se cubrirá con una lanzadera.

Las fuentes consultadas señalan también que la experiencia del Ayuntamiento con proyectos similares habría inclinado la apuesta del club por Dos Hermanas. El actual presidente, Ángel Haro, es vecino del municipio y tiene una empresa en el polígono de la Isla.