La cantera tiene dos cometidos:
1. Dar profundidad barata a la plantilla, en toda plantilla los puestos 20-25 son jugadores que cobran poco y participan poco en la temporada, esos puestos son los que deben cubrir la gente de la cantera, son jugadores justitos, que no protestan y cobran mas primas que ficha. No quieren salir por que la ficha será parecida en otro club y arriesgan las primas, por que es muy probable que tengan que salir a segunda división. Esos jugadores rebajan en unos 5-10 millones el coste de la plantilla y los 100-300 minutos que tienen que jugar cumplen, no ganan partidos pero están ahí por si los necesitas.
2. Sacar un crack de vez en cuando. Un canterano, salvo casos excepcionales no tienen valor, valen mas por lo que puedan ser que por lo que son. Si vendes un canterano por 5 millones es mucho dinero, su precio real es nulo, pero te arriesgas a no conocer ese presunto crack que pueda valer 50 millones.
Con la política actual no se cubre ni el primer caso, ni el segundo. Vender a un tercer delantero significa dejar libre ese puesto, con el problema que lleva si se lesiona al suplente o el titular o tener que fichar a otro jugador que, al cabo de 5 años, cobrara mas que el canterano que has dejado salir por 5.
1. Dar profundidad barata a la plantilla, en toda plantilla los puestos 20-25 son jugadores que cobran poco y participan poco en la temporada, esos puestos son los que deben cubrir la gente de la cantera, son jugadores justitos, que no protestan y cobran mas primas que ficha. No quieren salir por que la ficha será parecida en otro club y arriesgan las primas, por que es muy probable que tengan que salir a segunda división. Esos jugadores rebajan en unos 5-10 millones el coste de la plantilla y los 100-300 minutos que tienen que jugar cumplen, no ganan partidos pero están ahí por si los necesitas.
2. Sacar un crack de vez en cuando. Un canterano, salvo casos excepcionales no tienen valor, valen mas por lo que puedan ser que por lo que son. Si vendes un canterano por 5 millones es mucho dinero, su precio real es nulo, pero te arriesgas a no conocer ese presunto crack que pueda valer 50 millones.
Con la política actual no se cubre ni el primer caso, ni el segundo. Vender a un tercer delantero significa dejar libre ese puesto, con el problema que lleva si se lesiona al suplente o el titular o tener que fichar a otro jugador que, al cabo de 5 años, cobrara mas que el canterano que has dejado salir por 5.
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