El cántabro fue expulsado la temporada pasada, cuando todavía era jugador del Real Betis, en un partido frente al Cádiz. Y fue en unas de sus declaraciones posteriores al terminar el partido frente al Valladolid cuando recibió la injusta sanción de 4 partidos, al decir que su expulsión contra el Cádiz en Liga fue premeditada por parte del árbitro Mateu Lahoz.
Tras las declaraciones de Canales, en marzo de este año, la RFEF decidió sancionar al jugador con 4 partidos de suspensión y 601 euros de multa. Pero la sentencia ha considerado que a Sergio Canales se le han vulnerado los principios de tipicidad, culpabilidad y presunción de inocencia debido a un error de expresión e interpretación en sus declaraciones. Después de esta decisión, Canales tendrá la oportunidad de jugar con su actual equipo, los Rayados de Monterrey de México, en el próximo campeonato Clausura 2024 sin recibir ninguna sanción.
El entonces jugador bético tuvo que acudir a la justicia ordinaria tras muchos recursos fallidos que llegaban a nada y no fueran estimados. Así obtuvo la suspensión cautelar de su sanción cuando ya había tenido que cumplir uno de los cuatro partidos de sanción que se le habían impuesto. Canales declaró que su comportamiento «siempre con los árbitros dentro y fuera del campo ha sido ejemplar, mostrándoles respeto máximo durante toda mi carrera profesional».
Esta decisión podría suponer un precedente histórico en el mundo del fútbol
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— Sergio Canales (@SergioCanales) March 31, 2023