Una vez más el Betis mostró una versión bastante decepcionante que fue superada claramente por el rival y que se encontró con un punto, que no mereció, y que no le sirve para nada en sus aspiraciones europeas. La entrada de Kaptoum y la liberación de Canales y Carvalho mejoró muchísimo el juego del equipo, pero llegó demasiado tarde. El sistema de tres centrales más cuestionado que nunca.
Así es (casi) imposible. Y las sensaciones del equipo son, cada partido que pasa, peores. El equipo no mejora, parece estacado en una única manera de jugar y los rivales ya conocen a este Betis de Setién. Y saben cuáles son sus debilidades. Hoy el Rayo, con dos semanas de preparación, sacó a relucir la mayoría de desajustes y la mayoría de defectos que tiene este equipo y este sistema que parece agotado.
Pero también sacó a relucir una de sus virtudes, el desgaste físico al que somete a los rivales, las piernas de los jugadores del Rayo comenzaron a fallar a falta de 20 minutos y el Betis aprovechó para empatar gracias a la mejora sustancial del equipo con el cambio de sistema.
El comienzo del partido fue realmente complicado para el Betis. Y esa complicación duró toda la primera mitad salvó un tramo que sí llegó a controlarlo. Casualmente en ese tramo es cuando llegó el gol del Rayo. El equipo de Jémez presionaba muy arriba, igualaba en hombres la línea de tres centrales del Betis y nunca dejó recibir en ventaja o girarse a los jugadores del centro del campo verdiblanco. La premisa era clara juntar líneas, cerrar el centro y que los jugadores más creativos del Betis no tuvieran espacio para generar alguna ventaja.
El sistema del Betis fue totalmente superado por la presión e intensidad de los jugadores del Rayo Vallecano y el doble pivote de hoy, Canales – Carvalho, hizo aguas en la primera mitad ante unos jugadores del Rayo que llegaban siempre a encimar y siempre con alguna ayuda. La primera parte fue un constante 2 vs 1 donde el jugador del Betis no tenía tiempo ni espacio para buscar y encontrar al hombre desmarcado.
Los jugadores del Betis corrieron, y seguramente más o un número similar al de los locales, pero en directo pareció que les pasaba un avión por delante durante más de 70 minutos.
En ese contexto, y con la línea del Rayo Vallecano casi a la altura del centro del campo los jugadores del Betis intentaron buscar en profundidad a los hombres de arriba ya que tenían espacio para correr, pero las imprecisiones marcaron el ritmo del partido de un equipo, el de Setién, totalmente superado por fútbol y físico por el rival.
Y también por inteligencia táctica. El Rayo, o más bien Raúl de Tomás descubrió un desajuste en la defensa del equipo de Setién y lo explotó. Y lo explotó hasta encontrar así el primer gol. Mandi salía a la ayuda de Emerson dejando solo a los dos centrales basculando hacia la derecha, una basculación que no hacia Tello en el carril zurdo dejando un espacio entre central y carrilero, que aprovechó el Rayo para centrar y buscar a sus rematadores. Lo hicieron una y otra vez hasta que, no solo RDT sino, también otro jugador, llegaron totalmente solos a la zona de remate.
Ese desajuste puede dejar entre dicho al sistema de tres centrales y dos carrileros ya que las entradas constantes del Rayo por la banda abrieron al Betis y le dejaron totalmente expuesto. Y la mejora sustancial con el cambio de sistema tras la entrada de Kaptoum debería abrir ya el debate porque al Betis se le acaba el tiempo.
En la segunda parte el Rayo mostró la misma intensidad, pero comenzaron a verse los primeros síntomas de desgaste. Intentó parar el partido con multitud de faltas y multitud de parones con jugadores en el suelo que acabó desesperando aún más a los jugadores del Betis que seguían con la imprecisión de la primera mitad.
Hasta la entrada de Kaptoum, o más bien el cambio de sistema, que varió para bien el partido para el Betis. Ya eran los laterales y extremos del Rayo quienes sufrían a Emerson y Tello y no al revés y ya Canales y Carvalho comenzaron a recibir de cara y en situaciones ventajosas. Y si el cántabro y el portugués reciben liberados y en zonas ofensivas suelen generar suficiente peligro para marcar un gol. Y así lo hicieron. Canales aguantó el balón, generó un espacio que ocupó Carvalho, le entregó el balón y el portugués volvió a abrir a Tello que, con todo el movimiento de basculación defensiva del Rayo, se encontraba totalmente solo en el área rival.
El gol fue consecuencia de la liberación de dos jugadores que no estaban jugando en la posición que más saca a relucir todas sus virtudes. Y ellos no son los únicos. El debate del sistema será recurrente en una semana donde el Betis se va a jugar sus últimas aspiraciones por clasificarse, o al menos, luchar por una de las plazas europeas.
Pau López |
Fue de lo más destacado del equipo. El Rayo tiró y centro mucho al área, pero el catalán se mostró seguro en la mayoría de acciones. En el gol no pudo hacer absolutamente nada. |
Mandi |
Totalmente superado cuando salía a la ayuda de Emerson en la banda derecha. No pudo en el duelo individual con Bebé. La banda izquierda del Rayo, Alex Moreno y Bebé, fueron un constante foco de peligro para el Betis. No fue para nada su mejor partido. |
Bartra |
Hizo un partido más que correcto y ganó la mayor parte de los duelos individuales contra Raúl de Tomás. Además, fue el central que más intentó sacar el balón con algunas condiciones para romper las líneas tan juntas del equipo vallecano |
Sidnei |
El mejor durante el peor tramo del equipo, es decir toda la primera hora del encuentro. Defensivamente correcto y siempre encontrando salida con el balón. Acabó el partido de lateral izquierdo |
Emerson |
De menos a más. Sufrió muchísimo las subidas de Alex Moreno y se le vio poco en ataque en la primera mitad. En la segunda parte, y tras el cambio de sistema, encadenó varias jugadas positivas y mejoró bastante |
Tello |
Fue uno de los jugadores más flojos del equipo durante todo el partido. Bastante desacertado en los pases en campo propio. Aun así, siempre suele estar o participar en la mayoría de acciones de peligro del equipo. Hoy apareció para empatar |
William |
Lento, previsible y bastante flojo en la primera mitad donde además perdió demasiados balones para lo que acostumbra. Tras el cambio de sistema, el portugués, ya jugando de interior, mostró muchas de las virtudes que demuestra en la selección. Fue de lo peor en la primera mitad y de lo más destacado en la segunda. Indicativo de cuando los jugadores juegan en las posiciones donde se encuentran más cómodos. |
Canales |
Al igual que Carvalho, mejoró cuando se acercó al área en la segunda mitad. Alejar al cántabro de zonas ofensivas para tenerle en la creación inicial es algo que el Betis no puede permitirse si quiere ganar los partidos. Desaparecido en la primera mitad, resolutivo y diferencial en el último tramo del partido. |
Joaquín |
No estuvo nada acertado ni tomó las mejores decisiones como todos. La intensidad del rival hizo por hacerle desaparecer del partido. Se movió en las tres posiciones atacantes, pero no consiguió nunca conducir en ventaja. |
Jesé |
Desesperado y terminó por desesperar a sus compañeros con sus continuos aspavientos. Es verdad que luchó, corrió y sufrió como el que más, pero esas muestras de cabreo no ayudan a nadie. Aun así, estuvo algo más acertado que sus compañeros en el ataque. |
Lo Celso |
Seguramente no fue el peor del partido del equipo, pero sí el que más lejos está de su mejor nivel. Aun así, lo intentó y buscó mucho el pase en profundidad. Se ofreció, pero nunca recibió en posiciones donde podría hacer daño |
Loren |
Su salida mejoró al equipo fijando a los centrales del Rayo y permitiendo que los de segunda línea llegarán más cómodos. |
Kaptoum | Su entrada mejoró al Betis tácticamente porque individualmente no mejoró a Lo Celso, por ejemplo. Aun así dejó buenos minutos en lo que jugo |
Sergio León |
Poco pudo aportar. Tiró algún desmarque en ruptura, pero nadie le encontró. |